Page 27 - Revista Virtualidad Educativa edición 2
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   A manera de profundización, se ha considerado una breve caracterización de cada uno de los aspectos del decálogo:
1- Considerar la problemática del contexto escolar y/o comunitario.
En el contexto escolar se dan problemáticas que pueden utilizarse como punto de partida para ser utilizados en el proceso de enseñanza aprendizaje. Ahora bien, una manera, entre otras, de establecer la relación de la escuela con la comunidad es que en el proceso de enseñanza aprendizaje se incluyan también las problemáticas de la comunidad.
A partir de lo anterior es importante utilizar como estrategia, la solución de problemas existentes en estos contextos, siendo esta una vía y no el fin en sí. Debe quedar claro que la función de la escuela no es resolver la problemática de la comunidad, pero sí puede la escuela mediante las problemáticas existentes en dicha comunidad propiciar la preparación y formación integral de los estudiantes para la vida, que en esencia es la principal función de la escuela.
Para lograr lo antes expuesto se requiere en primer lugar que la escuela diagnostique y determine, no dos o tres problemáticas; sino que se deben tener claridad de las diferentes problemáticas que existen en la comunidad, desde los diferentes ámbitos (económico, político, social, familiar, educativo, de salud, etc.). Esta precisión debe permitir finalmente la integración de las diferentes disciplinas en un proyecto y, por supuesto, propiciar en los estudiantes la motivación necesaria, al encontrar la aplicación en la práctica de lo que se aprende en la escuela.
Covn esta idea, se puede interpretar que los proyectos en el contexto educativo, deben responder a problemáticas propias de la escuela y la comunidad y no a un tema del programa o a un producto en particular, donde posiblemente el estudiante no vea la relación con lo que sucede en su entorno. Es así entonces que el punto de partida para establecer un proyecto en el contexto educativo es el dominio de las diferentes problemáticas que acontecen en el contexto escolar y/o comunitario.
2- Considerar la metodología de proyecto más apropiada, decidida por el maestro.
Ya se han mencionado, desde la introducción, algunas metodologías para el desarrollo de proyectos educativos. Los programas de estudios pueden sugerir la metodología a utilizar, pero es el maestro quien decide si la utiliza o no, siempre pensando en lo que pueden hacer los estudiantes para resolver el problema.
Si bien las metodologías existentes pueden ayudar a un docente que comienza a trabajar con proyectos, lo cierto es que en la medida que va adquiriendo experiencia en su desarrollo, puede tomar otras decisiones tales como seleccionar, adaptar o elaborar
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